lunes, 21 de enero de 2013

SYLVIA ELLSTON

SYLVIA ELLSTON
1976 -
(española)


 III PECADO CAPITAL (Avaricia)

  • XXVIII

    El buitre oscuro
    sale de su nido,
    busca carroña.
    Así te pudras.
    Así como eres.
    Así te verán.
    Nada mereces.
    Nada ganaste.
    Nada obtienes.
    Vuelve atrás,
    a tu oscuridad
    No salgas más.
    Así te pudras.
    Así como eres.
    Así te verán.
    Nada mereces.
    Nada ganaste.
    Nada obtienes.
    Codicia, avaricia,
    es tu alimento,
    así te atragantes,
    con larga agonía
    Así te pudras.
    Así como eres.
    Así te te verán.
    Nada mereces.
    Nada ganaste.
    Nada obtienes.
    Aquello que ansías,
    querrás obtener...
    Será tu condena.


  • RÉQUIEM POR UNA AFRENTA



    XXVII
    Desde mi infierno miro hacia arriba,
    Contemplando esa luz que por fin me ilumina.
    Brilla, pero no me ciega ni me intimida.
    ¿Será esta la luz que salvará mi vida?
    Mi ánima quedó muerta, la fulminaron.
    Malditos cobardes, viles y macabros.
    Lo que un día fui, solo quedan despojos.
    Jirones, miedo y horror, eso quedó.
    Los espectros del pasado me visitan,
    Cicatrices que nunca se borrarán.
    Como óleo usan uñas que en mi piel se clavan.
    Pintando en mi memoria aquel vil momento.
    Nada de mi ser anterior ya quedaba,
    Era un ánima en pena, olvidé reír.
    Y mi fuerza vital ya me abandonaba.
    No me importa, pues no sentía ya nada.
    Manto de grana, de mis manos brotaban.
    Lo extendí para darle la bienvenida,
    a esa Dama Oscura, que al fin me encontró.
    Llegó el momento, me dispuse a marchar.
    Huesuda mano que ante mí se extendía.
    Quise aceptarla pero me rechazó.
    Ella supo que este no era mi momento.
    Ignoró el ruego y en silencio partió.
    Desde el espejo, mi otro yo me miraba.
    Me preguntó por qué me dejé vencer.
    Si además de arrancarme mi voluntad.
    Les doy lo que no se pudieron llevar.
    No quiero ser un reo de mis temores.
    Con sumo cuidado comienzo a zurcir.
    Los pedazos raídos que de mí aún quedan.
    ¡Lo conseguiré, seré como antes fui!
    El tiempo que tarde no importa, no hay prisa.
    Ya lo he decidido, no desistiré.
    Volveré a sonreír, seré la que fui.
    Y esos recuerdos no me dañarán más.
    Desde mi infierno miro hacia arriba,
    Contemplando esa luz que por fin me ilumina.
    Brilla, pero no me ciega ni me intimida.
    ¿Será esta la luz que salvará mi vida?

3 comentarios:

  1. Ha sido todo un hallazgo esta notable poeta española. . Su poesía es de gran significación, profunda, veraz, y rítmica.
    Estoy cierto que ha de ocupar lugares de gran importancia en el gran bosque de la Poesía...

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  2. Ufff. He de decir que me siento tremendamente halagada. Que alguien como tú me reconozca de este modo, me crea una sensación indescriptible. Muchísimas gracias, estoy muy emocionada.

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  3. Ains, y muchísimas gracias a Chema Elez, que gracias a sus consejos, pude recabar "Réquiem por una afrenta", ya que esta poesía en cuestión me costó mucho darle forma.

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